Gracias DIOS existe internet!!!

viernes, 9 de noviembre de 2012

ESE SALÓN DE BAILE LLAMADO VIDA



Hace algún tiempo (entre infantiladas, drogas y género musical no tan definido) tuve la maravillosa idea de estudiar Cine y televisión (todavía no se me quita la idea, no crean, porque como dicen las líricas de Mel Brooks ¨I wanna be a producer¨... y con lo de las drogas mejor no comento acá) pero supe que no era mi tiempo, más que todo en cuestión del bolsillo.

Conocí a Luis en esta época cineasta, el escritor de este blog, y desde ese entonces cada que nos vemos el saludo es el mismo: ¨¿Cómo estás Charlito?¨ Me¨dice un Luis con su típico cabello llamativo y forma de ser explosiva, casi siempre en un estado de emoción bastante alterado justo acorde con su personalidad;  yo respondo: ¨¿Cómo estás Luisito?¨ Y compartimos un par de risas y un par de pasos de baile sobre la pista que es este mundo (Dicen por ahí que la vida es una canción así que lo que nos toca es bailarla, Luis le hace completo honor a esto).

Precisamente de estas cosas son las que quiero hablar en esta entrada. Luisito me dio la gran oportunidad de participar en su blog y no veo mejor manera de hacerlo que hablando de esos encuentros con seres que uno se topa en este gran salón de baile llamado Vida y el efecto que producen en nuestro baile (tratando de acomplarme a su estilo de blog sin perder el mío, incluso mientras escribo voy escuchando un poco de Modeselektor y Florence para matizar el mood a lo Popper).

Todos los días, y sin sacar uno solo del esquema, interactuamos con alguien diferente y siempre sin darnos cuenta desatan una cadena de eventos que nosotros vemos como algo natural y ni siquiera le damos importancia, cuando en realidad sin ese encuentro el mundo sería totalmente distinto.

Mi teoría favorito es el Efecto mariposa, y otra de mis favoritas es la de los Seis grados de separación (Esa que dice que todos estamos conectados con todos los seres humanos por medio de una separación de seis personas de distancia, búsquenlo si no tienen la menor idea de lo que estoy hablando, a veces explicarlo hasta a mí me da dolor de cabeza, es como tratar de explicar el sarcasmo) y cuando unimos las dos teorías BOOOM tenemos la forma en que todo funciona en este mundo. Interacciones, engranajes que se mueven a gran velocidad, todo el tiempo.

Conocer a Luis (por poner un nombre y además es el homenajeado acá) ha desencadenado en mi vida una infinidad de situaciones que de seguro ni siquiera yo me he dado cuenta, entablar alguna conversación en la Veritas con Luis de seguro pudo evitar que me atropellaran si no lo hubiese hecho, o quizá evitó que conociera al amor de mi vida (o sexo casual) en ese trayecto que atrasé por hablar con él unos quince minutos... o quizá el efecto mariposa esté en movimiento todavía y sin saber cuándo ni cómo aparecerá en mi futuro una oportunidad increíble de vida solamente por hablar con Luis hace algunos años, sentados en la universidad...

Y nos sucede con cada uno de los bailarines en esta pista de baile que tanto hablo. Cada uno baila a su ritmo, muchas veces nos contagian su forma de bailar y la cambiamos por un momento, en muchas ocasiones nos gusta tanto un paso de baile de otro que lo adoptamos como nuestro.

Al menos yo trato de agregar muchos pasos de baile porque son los que eventualmente dirán mucho de quién es Charlie, mientras otros se dedican a tratar de ser solistas pero incluso así se ven afectados por los demás.

De no conocer a Luisito no estaría sacando tiempo fuera de mi blog y no estaría dedicando tiempo para esta entrada, no sé qué pude haber hecho mejor o peor en el rato en que escribí esta entrada, lo único que sé con seguridad es que decidí bailar al ritmo de esta entrada para darle más sabor al baile del autor de este blog, y eso cambia mi vida y el rumbo de esta por completo.


Lo que nos queda es seguir bailando porque eventualmente la música se va a acabar y no quisiera llegar a ese punto sin haber disfrutado de todos los géneros y de la mayoría de sus bailarines.
Colaborador: 
Charlie Alvarado (Charlie Odow)



Debo confesar amigos que esta entrada nos solo me genero un par de movimientos de baile mientras lo leía una y otra vez, si no que también provoco la salida de un par de lagrimas de mis ojos. Y es que dio justo en el punto, este tipo de temas siempre me envuelven con pasión.

Charlie es uno de los culpables y creo que lo desconoce de que yo me involucrara en esta adicción del los blog’s, el suyo es fuente de inspiración para mi, lo leo casi a menudo durante la semana  llevándome por lo general sorpresas gratificantes.

Para presentar a charlitooo nesecitaria una entrada aparte, pero si están interesados en conocer  y probar su estilo de baile, de una persona humilde, llena de sensibilidad y sobre todo siempre lleva una  contagiosa sonrisa en la jeta en todo momento les dejo todos los links posibles.

Yo deseo que todas las personas que lean esta entrada tenga en su vida no uno si no muchos “chalitos” para llenen su vida de sonrisas y de ritmo.

Blog: El Gaymer
Twitter:@CHARLIEODOW 

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1 comentario:

Charlie Odow dijo...

Puro amotz, me di cuenta de que no había comentado acá y la descripción al final Luisito fue de lágrimas también.

¡Sos genial! Un enorme abrazo, esperando toparme con vos una vez más sobre esta pista de baile.